Crisis económica y autocensura amenazan medios ecuatorianos

20.07.2025

Reporteros Sin Fronteras advierte que la crisis financiera nacional pone en peligro a los medios ecuatorianos. La falta de recursos ha llevado a despidos, cierres y una marcada autocensura, al tiempo que el crimen organizado y el uso de la publicidad oficial son usados como herramientas de presión. Ecuador ha retrocedido 30 puestos en el ranking global de prensa libre. 

La situación de los medios de comunicación en Ecuador se ha vuelto cada vez más precaria, enfrentando una doble amenaza: por un lado, una profunda crisis económica que pone en jaque su sostenibilidad financiera, y por el otro, un aumento alarmante de la autocensura, impulsada por la violencia, las presiones políticas y la falta de garantías para el ejercicio periodístico.

La Crisis Económica: Un Asfixiante Cerco Financiero

La viabilidad financiera de los medios ecuatorianos ha sido golpeada severamente, lo que ha llevado a un deterioro significativo en la calidad y profundidad del periodismo:

  • Caída de ingresos por publicidad: La contracción económica general, agravada por eventos como la pandemia de COVID-19, ha reducido drásticamente la inversión publicitaria, que es la principal fuente de ingresos para la mayoría de los medios. Esto afecta tanto a medios tradicionales (impresos, radio, televisión) como a plataformas digitales.

  • Precariedad laboral: La falta de recursos ha llevado a recortes de personal, salarios bajos y retrasos en los pagos, lo que empuja a los periodistas a la informalidad y los hace más vulnerables a presiones externas.

  • Desaparición de unidades investigativas: La escasez de fondos ha provocado el cierre de departamentos de investigación, lo que limita la capacidad de los medios para producir reportajes de largo aliento y de alto impacto, dejando "agujeros negros de información" en temas cruciales.

  • Dependencia de la publicidad estatal: En algunos casos, la publicidad gubernamental se convierte en una de las pocas fuentes de ingresos, lo que puede condicionar las líneas editoriales y comprometer la independencia.

  • Dificultad para la transformación digital: Aunque el consumo de noticias se ha volcado a lo digital, muchos medios luchan por encontrar modelos de negocio rentables en este nuevo ecosistema, sin poder monetizar adecuadamente su contenido en línea.

La suma de estos factores lleva a que muchos medios, especialmente los pequeños y regionales, apenas "sobrevivan con clickbait", en lugar de invertir en periodismo de calidad.

La Autocensura: El Silencio del Miedo y la Presión

La autocensura se ha convertido en una práctica extendida en el periodismo ecuatoriano, no solo por presiones económicas sino, cada vez más, por un clima de violencia y hostilidad:

  • Amenaza del crimen organizado: El aumento de la violencia y el poder del crimen organizado en Ecuador es, con diferencia, la mayor amenaza actual. Periodistas que cubren temas de seguridad, narcotráfico o corrupción se enfrentan a amenazas directas, extorsiones, ataques y, lamentablemente, asesinatos. Esta situación ha llevado a que zonas enteras del país se conviertan en "zonas silenciadas", donde los periodistas evitan cubrir ciertos temas por miedo a represalias.

  • Violencia institucional y política: A pesar de algunos periodos de "normalización" en las relaciones entre el gobierno y la prensa, persisten las tensiones y la polarización. Se denuncian ataques directos desde el gobierno hacia medios y periodistas, así como el bloqueo al acceso a la información pública, lo que limita la capacidad de fiscalización.

  • Falta de garantías de seguridad: Los periodistas no sienten que el Estado les ofrezca la protección necesaria. La falta de condenas en casos de asesinatos o ataques a periodistas envía un mensaje de impunidad que fomenta el miedo.

  • El "clima" de intimidación: La autocensura no siempre es el resultado de una amenaza directa, sino de un "ambiente" donde los periodistas aprenden a callar antes de ser obligados a hacerlo. La repregunta se limita, la profundidad de las investigaciones disminuye y se evita tocar temas sensibles.

  • Cargas psicológicas: El constante riesgo, el miedo y la presión tienen un costo psicológico en los periodistas, quienes a menudo recurren a la autocensura como una forma de defensa y autoprotección.

Consecuencias para la Democracia y la Ciudadanía

La combinación de crisis económica y autocensura tiene efectos devastadores para la sociedad ecuatoriana:

  • Deterioro de la libertad de prensa: Ecuador ha experimentado un significativo retroceso en los índices de libertad de prensa, como lo reporta Reporteros Sin Fronteras. Esto refleja un debilitamiento del pilar democrático que representan los medios libres.

  • Proliferación de la desinformación: En un entorno de medios frágiles y con autocensura, la desinformación y las "noticias falsas" ganan terreno, dificultando que la ciudadanía acceda a información veraz y contrastada.

  • Disminución de la rendición de cuentas: Cuando los periodistas no pueden investigar y reportar libremente, los actos de corrupción, el abuso de poder y las acciones del crimen organizado quedan impunes, debilitando la rendición de cuentas.

  • Sociedad menos informada y participativa: La ciudadanía se ve privada de la información necesaria para tomar decisiones informadas, participar en el debate público y fiscalizar a sus gobernantes.

En conclusión, la prensa ecuatoriana enfrenta un escenario "crítico" donde la supervivencia económica y la integridad física de los periodistas son desafíos constantes. Superar esta crisis requerirá un compromiso renovado del Estado con la libertad de prensa, el fortalecimiento de la seguridad para los comunicadores y la búsqueda de modelos de negocio sostenibles que permitan a los medios seguir siendo un pilar fundamental de la democracia.