Colombia: Polémica marca “Frisby España” despierta orgullo nacional
Charles Dupont, empresario belga, lanzó en España una cadena de comida rápida llamada Frisby España—mismo nombre de la emblemática marca colombiana de pollo frito—tras no lograr un acuerdo de franquicia. Esto generó una controversia legal y un fuerte rechazo en redes sociales enfocado en un tema de identidad y orgullo nacional.
Recientemente, una disputa legal internacional ha puesto a la popular cadena colombiana de pollo frito, Frisby, en el centro de la controversia, hiriendo el orgullo nacional de muchos colombianos. La polémica se desató luego de que una empresa española registrara y empezara a usar la misma marca y un logo similar al de la icónica cadena, lo que generó un fuerte rechazo en Colombia.
Los detalles de la disputa
Frisby, con más de 40 años de trayectoria y un fuerte arraigo en la cultura colombiana, se encontró con una empresa española que no solo registró su nombre en Europa, sino que también comenzó a promocionar un concepto similar. La empresa española ha defendido su decisión argumentando que la marca estaba disponible en el mercado europeo y que la compañía colombiana no había demostrado un "uso efectivo" de su registro en la región, una condición necesaria para mantener los derechos marcarios en la Unión Europea.
El "orgullo colombiano" se moviliza
La controversia escaló rápidamente, convirtiéndose en un asunto de orgullo nacional. En redes sociales y medios de comunicación, miles de colombianos manifestaron su apoyo a Frisby, considerándola un símbolo de la gastronomía y la identidad del país. La reacción fue tan masiva que otras marcas colombianas, e incluso instituciones gubernamentales y equipos deportivos, se unieron a la ola de solidaridad con la etiqueta "nos damos aPollo", un juego de palabras que resalta el apoyo.

¿Qué podría pasar?
La disputa legal por el uso de la marca está en manos de la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO). Frisby Colombia tiene que demostrar de manera fehaciente que ha utilizado su marca en el mercado europeo en los últimos años. De lo contrario, podría perder los derechos de exclusividad sobre su nombre, lo que permitiría a la empresa española operar libremente bajo la marca Frisby en la región.
Este caso ha puesto en evidencia la vulnerabilidad de las marcas nacionales al expandirse internacionalmente y ha generado un debate sobre la necesidad de que las empresas colombianas refuercen sus estrategias de protección de propiedad intelectual en otros mercados.